La memoria, su importancia, Características
Dice Joaquim Fuster ( Profesor de Psiquiatría y de Ciencias de la Bioconducta en el Brain Research Institute de la Universidad de California) “ en De Anima Et Vita (1538), el valenciano Juan Luis Vives, primer gran pedagogo y psicólogo de la Edad Moderna- tutor de Catalina de Aragón en la corte de Enrique VIII- dejó escrito lo siguiente: De dos cosas que han sido simultáneamente aprehendidas, si una de ellas ocurre, usualmente evoca la representación de la otra”.
Esta es ni más ni menos, la esencia de la memoria asociativa, y por consiguiente del aprendizaje.
Tres aspectos destaca Fuster con respecto a la memoria para una educación (aprendizaje eficaz), la memoria inconsciente, el papel de ciertas emociones en el aprendizaje, y la dinámica cerebral entre maestro y discípulo.
Es interesante darnos cuenta de que en los organismos superiores la capacidad de memoria tiene un sentido de continuidad que evita que tengamos la sensación de vivir en una especie de eterno presente, y además nos constituye, de algún modo “somos memoria” los recuerdos enhebran nuestra identidad, como dice Jorge Luis Borges “ Somos memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos”
Y es una interesante paradoja, pues esta característica, señalada por Ignacio Morgado, en su libro Aprender, Recordar y Olvidar, es una virtud que el ser humano debe buscar para ser más efectivo, con técnicas como la Meditación el Mindfulness, Mnemotecnia, y algunas recomendaciones que oportunamente iremos aportando.
Aprender desde el punto de vista neurológico significa, básicamente, adquirir nuevas representaciones neuronales de información y establecer relaciones funcionales entre ellas, y las ya existentes en el cerebro. Son procesos de cambio que en conjunto denominamos plasticidad estructural y plasticidad funcional del cerebro, la memoria es por lo tanto los cambios que se producen en el cerebro para retener o almacenar lo que aprendemos.
El aprendizaje y la memoria son dos procesos estrechamente ligados y en cierto modo coincidentes, como las dos caras de la misma moneda.
En el año 1884, el médico español Santiago Ramón y Cajal impartió una brillante conferencia en la Royal Society de Londres, en la que postulo que el aprendizaje podría tener lugar como consecuencia de la aparición de minúsculos y nuevos brotes de terminaciones en las prolongaciones de las células del cerebro. El tiempo y los nuevos hallazgos de las neurociencias le han dado la razón.
Los nuevos circuitos y redes neuronales que de ese modo se establecen, constituyen el soporte o modo físico en que se almacenan las memorias. Esas redes son losCógnitos, en terminología acuñada por el neurocientífico Joaquim Fuster.
La memoria es analógicamente comparable a los canales que forma el agua de la lluvia en lo suelos blandos de los caminos. Cuanto más llueve, más se profundizan y estabilizan esos canales. Le recuerdan además, al agua, por dónde debe circular cuando regrese. En las personas y los animales, la experiencia es cómo la lluvia, pues ella es la que marca en el plástico cerebro los canales neuronales por dónde circulan los recuerdos.
En ese sentido en los años sesenta, y principios de los setenta, los científicos noruegos Terje Lomo y Timothy Bliss, descubrieron a través de experimentos con ratas, la Potenciación sináptica a largo plazo, y la Depresión sináptica a largo plazo.
El error de predicción y el método ILVEM
La diferencia entre lo esperado y lo que verdaderamente ocurre recibe el nombre de error de predicción y es un factor que favorece notablemente la recordación.
Para recordar y reiterar una conducta el error de predicción debe ser positivo.
Ejemplo:
Cuando movemos un árbol y caen muchos más frutos de los esperado, o caen los habituales, los esperados, o caen menos o ninguno.
El que tendrá efectos en nuestra memoria para grabarse será el positivo, cuando caen muchos más frutos de lo esperado.
Desde el punto de vista neurocientífico hace tiempo que se sabe que cuanto mayor y más positivo es el error de predicción, más cantidad del neurotrasmisor dopamina liberan las neuronas del área segmental ventral del mesencéfalo, en lugares de la base del cerebro, como el nucleo accumbens.
Los métodos de memorización, como por ejemplo el de la empresa dedicada a estos temas de memoria y lectura veloz ILVEM (entre otras), apelan a este concepto, asociar y realizar la asociación más sorprendente posible, de tal manera que por ello y de acuerdo a lo que nos dice el error de predicción queda mucho mejor grabada la información.
Por otro lado también se están estudiando las influencias epigenéticas en el aprendizaje y la memoria, que parecen tener una importancia que no era tenida en cuenta hasta ahora.
Tipos o clases de memoria
Hay aprendizajes que requieren poco esfuerzo, y forman rápidamente memorias de corta duración, que nos sirven para ejecutar una tarea momentánea, como la que nos sirve para marcar un número de teléfono o buscar la página requerida de un libro. Otros aprendizajes implican más trabajo y forman las memorias duraderas que nos permiten conductas habituales, como identificar objetos familiares, hablar una lengua, vestirnos, conducir un vehículo. Esas memorias duraderas, también nos permiten adquirir el conocimiento semántico, como el que tenemos de geografía, de ciencias sociales o del sistema nervios, y el conocimiento episódico o autobiográfico, que son los recuerdos de las cosas que nos han pasado en distintos lugares y momentos de nuestra vida.
Tipos de memoria según la duración
Inmediata
De corto plazo
Intermedia de medio plazo
De largo plazo
Según su contenido
Sensorial
Declarativa o explícita
· Episódica
· Semántica
Implícita o no declarativa
Memoria procedimental
Siete pecados de la memoria
Factores que facilitan su mejor funcionamiento:
· Emociones y memoria
· El papel del estrés
· Mindfulness ( técnicas de relajación) y memoria
· El rol de la motivación
Cómo saber la parte biológica y su funcionamiento ayuda a utilizar mejor y/o más eficientemente a la memoria.
Qué tan necesaria es una buena memoria, se ha exagerado su importancia como dice en su libro “Haz tu cerebro+inteligente”, creemos que no, si pensamos en unir el razonamiento con la memoria, pues la pregunta es como podemos arribar a conclusiones certeras, pues teniendo premisas sólidas, y la memoria juega un rol decisivo para poseer y que no se nos escapen esas premisas.
Tips para mejorar la memoria
Lo que debemos saber para utilizarla mejor.
Lo que debemos hacer para mantenerla ágil y eficiente
Cómo entrenar a la memoria de trabajo
Cómo entrenar a la memoria de largo plazo
Explorando la “mentira del ayer”
Que recordamos, cuando por ejemplo viajamos a diferentes momentos de nuestras vidas, que imágenes vienen de la infancia, de la juventud, de nuestra temprana madurez, que tanto podemos rescatar de esos días.
Que tan precisos son esos recuerdos, será verdad lo que afirmaba Proust, que esos recuerdos del ayer son altamente imprecisos, tanto que los denominó “la mentira del ayer”.
En mi caso recuerdo solamente generalidades, las tardes con las clases de mi mamá a chicos de primaria del barrio, de tantos momentos porque sólo algunos se conservan, que los hace perdurables, una característica genética de la memoria de cada individuo?, algún hecho que haya marcado a ese recuerdo con tinta indeleble, y luego estando presente cuanto es cierto y cuanto es construido por el individuo hoy, entramos allí al terreno de Proust.
Este es un aspecto de la memoria, aunque no menor pues nos constituye en quien somos, en nuestra identidad privada. Pensemos en los casos que con el paso de los años nos agrede el temido devorador de neuronas, Alzheimer, finalmente la persona desaparece primero cognitivamente y luego físicamente, de alguna forma podemos decir que somos memoria.
Otro aspecto la famosa frase de Eric Kandel “los procesos de la memoria nos son más útiles si podemos recordar rápidamente los sucesos felices y atenuar el impacto emocional de los acontecimientos traumáticos y de las decepciones”, es muy interesante porque nos conecta con dos aspectos que debemos considerar cuando hablamos de la memoria, las emociones y la positividad.
Un tema de gran importancia práctica si pensamos en aprovechar la memoria para ser felices, debemos recorrer este camino e indagar aspectos de aplicación concreta del concepto del premio nobel Eric Kandel.
En la memoria implícita, está el enorme porcentaje de cosas que hacemos sin pensar, es decir desde los chunks o cognitos ( al decir de Joaquim Fuster), que lanzan las actividades rutinarias que hacemos día a día, sin pensar, un tema que se relaciona con los hábitos, arquitectos de la vida de las personas, hacedores destinos según reza un viejo dicho.
Esto nos conecta con tema de los hábitos que cuando lo pensamos son la gran parte de las acciones que realizamos.
Aquí lo valioso, es convertirnos en observadores de hábitos para luego poder escoger aquellos que nos ayuden a vivir más felizmente.
( Los trabajos sobre la Psicobiología de los hábitos – artículo-, y el Poder de los hábitos-libro-)
Preguntas fundamentales
¿Qué es un hábito?
Los hábitos se forman de un modo espontáneo a medida que exploramos el medio físico y social y nuestro mundo interno. Ponemos a prueba las conductas en situaciones concretas, descubrimos cuáles parecen beneficiosas y no muy costosas las seleccionamos y pasamos a integrarlas a nuestra rutina.
¿Cómo el cerebro convierte una nueva conducta en rutina?
La memoria y la estructura de temporalidad
Dentro del estudio de la memoria los expertos le prestan considerable atención a los diversos tipos de memoria que a su entender existen, e intentan diversas clasificaciones de la misma, para luego seguir el camino de identificar en que lugar del cerebro esta cada una.
Me parece interesante pensar de otra forma, y asociar la memoria al pasado, al presente y al futuro, y ver que resulta.
Al hablar del pasado, casi es por definición la memoria, pues sólo podemos hablar de él, si lo recordamos, aún así creo que habrían dos clases, la memoria del pasado reciente, que nos permite recordar dónde dejamos las cosas, por ejemplo, y la memoria del pasado más lejano, de la infancia, de la juventud, de la madurez, y de los años de la vejez.
Reflexionando sobre este tema en mi caso, decidí ver que tanto recordaba sobre mi propia historia, y en ese estoy la titulé “La historia del YO”, y así recorrí mis primeros años, la niñez, la adolescencia, la juventud, la madurez temprana, la madurez tardía, y ahora.
No tengo aún las conclusiones, pero me gustaría en este punto ahondar sobre lo que estoy buscando.
¿Qué recuerdo?
Porqué lo recuerdo?
Qué lo hace memorable?
¿Qué recuerdo con más facilidad, los hechos, las personas, las caras, las formas de ser, los nombres, los compañeros, los profesores, los triunfos, las derrotas, etc?
¿Hay un factor común en esa rememoración?
¿Tiene que ver el impacto emocional?
¿Qué es más memorable, la infancia, la juventud, la etapa adulta, que hay de los primerísimos años?
Para hacer esto he decidido escribir que recuerdo, y empecé realizando un par de mapas mentales para guiarme en ese particular laberinto.
La memoria y el sueño
Un adulto joven pasa aproximadamente entre 70-100 minutos en el sueño NO MOR, para después entrar al sueño MOR, el cual puede durar entre 5-30 minutos, y este ciclo se repite, durante toda la noche durante el sueño.
Por lo tanto, a lo largo de la noche pueden presentarse normalmente entre 4 y 6 ciclos de sueño MOR
De todos los sistemas de memoria antes expuestos, la evidencia más consistente respecto al efecto positivo del sueño se ha observado en dos tipos de memoria: la memoria declarativa (memoria que es fácilmente expresada verbalmente: información de hechos y eventos), y la memoria procedimental ( memoria acerca de habilidades y destrezas motoras).
¿Cuánto tiempo debo dormir para que el sueño beneficie a la memoria?
¿Qué fase del sueño es la más importante para la consolidación de la memoria?
NO MOR: memoria declarativa
MOR: memoria procedimental
Caso Kekulé
Líneas de trabajo para esta parte
¨ La memoria y la estructura de temporalidad
¨ Los hábitos y la memoria ( también se relaciona con el cerebro en búsqueda de patrones)
¨ Las emociones y el tema del anclaje, que se relaciona con la premisa fundamental de la memoria asociativa, mencionado por el paisano ( valenciano), Juan Luis Vives ya en el año 1538.
